Empieza la temporada de calçots

Los calçots, esas cebolletas dulces que, acompañadas por una buena Salsa Romesco, hacen las delicias de grandes y pequeños.

En casa nunca hemos sido calçotaires, pero mi tía Isa sí y además hace una salsa riquísima. Hace años fui de calçotada con ella y disfruté de lo lindo, sobre todo rebañando la salsa con pan.

Este sábado tenía una calçotada entre amigos y me ofrecí para preparar la Romesco con la receta de mi tía. Me quedó de lujo aunque un poco suavita, para no matar el sabor del calçot. Yo me comí unos 20. Ummm! Deliciosos!

¡Ya estoy deseando que llegue la próxima!

Nota:  Mañana os contaré dos usos que le podemos dar a los calçots sobrantes.
 

Salsa Romesco

Ingredientes para 12 personas:

6 tomates maduros grandes

2 cabezas de ajos

100 gr de almendras tostadas

100 gr de avellanas tostadas

2 ñoras

Aceite de oliva virgen extra (aprox. 15 cucharadas)

Vinagre (aprox. 4 cucharadas)

Sal

Pon las ñoras en remojo unas horas antes. Una vez bien remojadas, saca las pepitas retira la carne de la piel ayudándote por una cuchara y reserva.

Pela las almendras y las avellanas tostadas y pica en el robot de cocina.

Precalienta el horno a 200ºC y escaliva los tomates y los ajos. Los tomates estarán listos en unos 15-20 minutos, los ajos un poco menos (10 minutos aprox.).

Una vez escalivados, pela y saca las pepitas de los tomates, y pela los ajos. Mételo todo en un vaso batidor. Añade la picada de amendras y avellanas, la carne de las ño ras, aceite, sal y vinagre al gusto, y bate hasta que quede una mezcla homogénea.


Esta salsa te puede servir tanto para los calçots como para acompañar una carne o pescado. Así que te recomiendo hacer un poquito más para que te sobre para otro día. Si la guardas en un bote de cristal hermético, te puede aguantar un mes en perfecto estado.